Los derechos constitucionales de los padres biológicos son extremadamente importantes. Los Derechos de los Padres están reconocidos como derechos fundamentales bajo la Cláusula del Debido Proceso de la 14ª Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos. Siempre que un Tribunal deba considerar si el interés superior del menor exige una adopción a la que se oponen los padres biológicos, parece entrar en conflicto con esos importantes derechos constitucionales. Por este motivo, son muy importantes los criterios de prueba que debe tener en cuenta un tribunal antes de conceder una adopción a pesar de la objeción de un padre biológico.

Esos criterios de prueba son totalmente diferentes de los criterios de prueba que un tribunal considera en un caso de custodia. Estas normas de custodia deben ignorarse, ya que no tienen relevancia alguna en un asunto de adopción controvertido.

El Tribunal Supremo de Virginia declaró en el caso principal de Copeland contra Toddque «el significado de el «interés superior del menor» es diferente en el contexto de las adopciones y debe interpretarse a la luz de los derechos procesales del padre biológico en su relación con el menor. Por lo tanto, aunque el Código de Virginia utiliza la misma frase que nuestros estatutos de custodia, su definición es mucho más exigente.»